RUFA Corrimos por el aire puro y la biodiversidad
Día a día las ciudades avanzan con proyectos inmobiliarios sobre las áreas naturales, disminuyendo así su capacidad de resiliencia y de convertir el dióxido de carbono en el oxígeno necesario para mantener la calidad del aire y la salud de los ecosistemas.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el 99% de las personas en todo el mundo está expuesta diariamente al aire nocivo. El aire contaminado genera efectos negativos para la biodiversidad y para la salud humana, aumentando el riesgo de infecciones respiratorias, entre otras enfermedades.
Está demostrado que la acción humana es una de las principales causas de la contaminación del aire a nivel mundial a partir de la quema de combustibles fósiles (carbón, petróleo o gas) para la obtención de energía necesaria para: calefaccionar o refrescar los ambientes, movilizarnos, producir bienes y servicios, trabajar, vestirnos y hasta entretenernos. Las ciudades generan además el efecto “isla de calor” que afecta el clima en un grave contexto de crisis climática.
Desde Germinar diariamente nos esforzamos, a partir de diferentes iniciativas, en crear y proteger áreas naturales indispensables para aportar biodiversidad y aire puro al ambiente. Es por nuestro trabajo y compromiso que Patagonia Argentina nos seleccionó como beneficiarios de donaciones que pudieran canalizarse a través de la carrera “Running Up For Air” (RUFA) para seguir trabajando por la calidad del aire y la protección de la naturaleza.
Agradecidos por este reconocimiento e impulsados por una propuesta diferente ¡Nos sumamos también a correr!
¿Qué propone la carrera Running Up For Air?
A mediados del año 2011, Jared Campbell, un corredor de élite de los Estados Unidos que participaba de largas carreras, se propuso entrenar subiendo y bajando las laderas del “Grandeur Peak”, una de las montañas que rodean Salt Lake City.
Al ascender la montaña repetidamente pudo percibir con claridad cómo mejoraba la calidad del aire cerca de la cima y cómo empeoraba considerablemente al descender. Fue en ese momento que reconoció lo sensible que es un corredor a la calidad del aire y decidió convertir esa experiencia y su entrenamiento en algo positivo.
Así nació la RUFA, una carrera en la cual corredores profesionales y aficionados se juntan para correr hacia arriba y abajo del Grandeur Peak durante 24hs generando conciencia y recaudando dinero para organizaciones que trabajan para mejorar la calidad del aire del Valle. Empezaron siendo unas tres personas allá por el año 2012 y hoy son miles de personas realizando la misma acción en distintas partes del mundo convirtiéndose así en un gran evento global.
¡Nuestro equipo también sumó kilómetros!
Como en Argentina no hubo una carrera oficial, decidimos rescatar el mismo espíritu de la carrera oficial y salir a correr para darle visibilidad a la problemática de la contaminación del aire y la pérdida de la biodiversidad en nuestra zona de acción habitual. Para algunas personas de nuestro equipo la propuesta resultó muy tentadora desde el inicio así que nos organizamos bien y salimos a entrenar para prepararnos para el día de la carrera.
Desde hace algunos años trabajamos en áreas naturales protegidas de la cuenca del Río Luján con acciones como: plantación de especies nativas, control de especies exóticas invasoras, realización de eventos y coordinación de voluntariado, entre otras. Vimos en esta carrera una oportunidad para que sus referentes nos cuenten cómo el avance de las ciudades sobre las áreas naturales impacta en la calidad del aire.
Durante el sábado 1 de junio de 2024 corrimos una distancia de aproximadamente 60 km entre los Municipios de Tigre y Escobar, pasando por:
- KM 0 – Reserva Natural Rincón de Milberg, Tigre
- KM 11 – Reserva Natural Nueva Esperanza, Dique Luján
- KM 16 – Punta Querandí y Radio Ciudad
- KM 21 – Plaza Las Garzas, Puente Santa Fe, Ingeniero Maschwitz
- KM 26 – Reserva Natural Educativa Ingeniero Maschwitz
- KM 35 – Reserva Natural Puertos del Lago
- KM 50 – Reserva Ambiental Cañada de Escobar
- KM 57 – Reserva Natural privada Náutico de Escobar Country Club.
En cada parada nos recibió un referente a quién preguntamos:
¿Qué problemáticas y desafíos enfrenta este área natural protegida actualmente?
¿Cómo benefician estas áreas a la salud del ambiente y de las personas?
¿Cuál es el rol de la comunidad local?
Una breve reflexión de nuestro equipo
Al finalizar la carrera, compartimos un momento de anécdotas y reflexión alrededor de un fogón. Todas las personas que corrimos destacamos la importancia de cada referente o “guardián”, la alegría por conocer la historia de cada lugar y pudimos percibir con claridad cómo va cambiando la calidad del aire entre las áreas naturales y el entorno que recorrimos hasta llegar a ellas.
Pudimos percibir con claridad cómo va cambiando la calidad del aire entre las áreas naturales y el entorno que recorrimos hasta llegar a ellas.»
Hemos notado cómo la destrucción de los espacios verdes se ha normalizado. Las personas que viven hace muchos años en la zona salen a caminar, correr o andar en bicicleta y perciben cómo la calidad del aire se ha deteriorado, sufren la tala de árboles en el ámbito público y privado y registran que ciertas aves ya no se visualizan ni escuchan sus cantos. La naturaleza se encuentra en retirada y sin embargo la vida sigue como si nada…
En el difícil (y constante) contexto socio-político-económico Argentino, resolver los conflictos personales se vuelve prioritario. El tiempo no abunda para el ciudadano promedio y la destrucción del ambiente no se prioriza, quedando como una preocupación de “clase media que tiene sus problemas básicos resueltos”.
La destrucción del ambiente no se prioriza, quedando como una preocupación de “clase media que tiene sus problemas básicos resueltos”.
Nos asombra que no se sepa que hay un derecho constitucional a un ambiente sano, el cual representa la base fundamental sobre el que se construye el desarrollo sostenible y saludable de la ciudadanía. Creemos que una de las causas de esta situación es que el ambiente se percibe como algo ajeno a uno y no como parte de uno.
Queremos destacar el rol fundamental que cumplen las reservas naturales urbanas en este contexto ya que son una puerta de entrada que invita a los ciudadanos y ciudadanas a participar de diferentes actividades que permiten reconectar con la naturaleza, generando sentido de pertenencia, bienestar y permitiéndoles que dimensionen los múltiples beneficios positivos que aporta a su vida.
¿Te quedaste con ganas de participar?
Si bien la carrera ya ha finalizado, todavía podés sumarte a la causa:
Agradecimientos: A Patagonia Argentina por confiar en nuestra labor y apoyarnos a través de su programa de Grants; A Zafrán por fortalecer nuestro cuerpo y espíritu con sus barritas de recetas honestas; A Suico por las proveernos de las remeras en que nos identificaron durante la carrera en tiempo récord; A tod@s los referentes de los distintos espacios naturales por protegerlos, contagiar el amor por la naturaleza y educar sobre la importancia de su cuidado y especialmente al equipo de Germinar que se animó a salir a correr por esta causa.